jueves, 6 de mayo de 2010

martes, 23 de febrero de 2010

El lenguaje


Definimos “LENGUAJE” como un sistema de signos (lingüísticos o no) regidos por un conjunto de reglas convencionales, cuya función primaria es la comunicación entre seres conscientes (personas o animales).
(Subsidiariamente, “lengua” sería una actualización de un lenguaje, y “habla” una actualización de una lengua -desde Searle se usan los “actos de habla” como la categoría semiótica fundamental-).




Veamos en primer lugar las diferencias entre el lenguaje humano y el animal:
1. La primera es que el lenguaje humano es articulado; es decir, posee unas unidades mínimas de significación (monemas) con las que se construyen otras más complejas (palabras, sintagmas u oraciones), por lo que el número de mensajes que puede producir es virtualmente ilimitado.
2. El lenguaje animal está compuesto de “señales”, que tienen carácter innato, que son respuesta a estímulos o expresan ciertos estados de ánimo, y que no tratan de influir sobre sus congéneres.
Pero el lenguaje humano está formado por “símbolos”, que han de ser aprendidos, que no se producen necesariamente como respuesta a estímulos o para expresar estados de ánimo, y que pueden tratar de influir sobre los demás humanos.
3. Y además, el lenguaje humano no es extrínseco al pensamiento.

Concepto de "comunicación"

Podemos definir “COMUNICACIÓN” como la transmisión de una información de un(os) sujeto(s) a otro(s) (personas, animales o máquinas) entre los que existe una correspondencia, con alguna finalidad.

· La comunicación es imprescindible para la realización del ser humano y para el sostenimiento de la sociedad.

Se acepta que todo acto de comunicación posee esta ESTRUCTURA desde que lo propusiera Jacobson:

1. Emisor del mensaje

2. Mensaje

3. Código por el que es codificado y decodificado el mensaje

4. Medio de transmisión del mensaje

5. Receptor del mensaje

6. Contexto (situación en que se emite el mensaje, y que a menudo ayuda a interpretarlo correctamente)

7. Relación entre emisor y receptor

Desde esta estructura se infiere que el acto de comunicación sigue en general el siguiente PROCESO:

Elaboración del mensaje;

Codificación y emisión por el emisor;

Transmisión por un medio;

Recepción, decodificación e intelección por el receptor.